Entre los años 70 y 60 A.C. llegaron los romanos a Benasque. Aquí se encontraron con feroces gue-
rreros que les atacaban a caballo. Esta zona estaba habitada por los suconenses, una subtribu de los
ilergetes, que ocupaban el valle de Chistáu, el valle de Benasque y llegaban hasta Laspaúles.
Los suconenses, mezcla de descendientes celtas y montañeses, plantaron cara a los romanos y los hi-
cieron retroceder en alguna ocasión. Los romanos comprobaron que disponian de caballos muy fuer-
tes capaces de llevar a dos jinetes a la vez ladera arriba, y muy bien domados, porque se ponían de
rodillas, a una orden de su amo, para facilitar su montura.
Cuando los suconenses se veian obligados a huir desaparecían, como si se los hubiese tragado la tie-
rra. Es probable que huyesen hacia el Valle de Estós por el único acceso que entonces habia: una
empinada y serpenteante senda, que ellos podían taponar fácilmente con ramas de arañones y zar-
zas.Para cuando los romanos habían despejado el camino, los nativos podíann haber pasado con
sus caballos a Lliterola o haber cruzado el puerto de Añes Cruces hacía Chistáu.
En aquella época se hacía pan en Benasque de los frutos secos del espino albar (pepidèra) y de las
bellotas.Era un pan que duraba muchos días.
El Valle de Estós, tan conocido ahora por sus lagos y sus picos de Posets (Llardana) y Perdiguèro,
es una zona en la que falta mucho por investigar.
El Dallíu: zona que se dallaba
Els Ordials: zona donde se cultivaba ordio
La Coma: zona de tierra feraz
La Ribèra: zona de campos y prados
¿Hubo núcleos de población en Estós?. ¿Hubo bordas?. ¿Bajaban todos los productos hasta Benas-
que con animales de carga?.
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